A raíz de un par de consultas que me llegaron por mail en estos últimos días, preguntándome acerca de esta herramienta, he decidido publicar este artículo. La idea de esta entrada es explicar en qué consisten los fideicomisos. Debido a que es un concepto, para muchos, complejo, me gustaría abordarlo con mayor grado de detalle. En consecuencia, la extensión sería demasiada y el texto, muy denso. Por lo tanto, haré una breve introducción al tema y al final del arículo podrán descargar un archivo en donde se explica profunda y detalladamente esta herramienta.
Ante todo, se debe clasificar a los fideicomisos en dos categorías: Ordinarios y Financieros.
A- FIDEICOMISOS ORDINARIOS
Contrato en virtud del cual una persona llamada "fiduciante" transfiere a título de confianza, a otra persona denominada "fiduciario", uno o más bienes (que pasan a formar parte del patrimonio fideicomitido) para que al vencimiento de un plazo, o al cumplimiento de una condición, éste transmita la finalidad o el resultado establecido por el primero, a su favor o a favor de un tercero llamado "beneficiario o fideicomisario".
Nos hallamos pues, frente a un negocio complejo que resulta de la unión de otros dos negocios: por un lado un contrato real (transmisión de la propiedad o del crédito de modo fiduciario) y por el otro un contrato obligatorio negativo (obligación del fiduciario de hacer sólo un uso limitado del bien adquirido, para restituirlo luego al trasmitente o a un tercero por aquél indicado).
Partes intervinientes
Es necesario que participen esencialmente dos partes en esta forma contractual, que son:
Fiduciante.: Es el titular de los bienes objeto de la transmisión fiduciaria.
Fiduciario.: Es quien recibe la propiedad fiduciaria de los bienes asumiendo, a través del contrato, la obligación de cumplir con una determinada gestión o administración de los bienes fideicomitidos.
Existen además en la figura legal otras dos personas como terceros interesados:
Beneficiario: Es la persona física, o jurídica, que recibe los beneficios de la administración fiduciaria. Al momento de la firma del contrato, esta persona puede ser de existencia real o futura, en cuyo caso, se especificarán los datos que permitan su clara individualización. Se podrán designar uno o varios beneficiarios, quienes recibirán en igual proporción los beneficios, salvo disposición en contrario determinada en el contrato.
Fideicomisario: Es el destinatario final de los bienes fideicomitidos, al cumplimiento del plazo o condición que establezca el contrato.
Modalidades de Fideicomisos Ordinarios
1- Traslativo de dominio: en este caso el Fideicomiso tiene como objetivo principal la transmisión definitiva del bien fideicomitido, en favor del fideicomisario.
2- Fideicomiso de garantía: el fiduciante transmite un bien (mueble o inmueble) en propiedad fiduciaria, garantizando una obligación que mantiene a favor de un tercero. La función del Fiduciario se limita sólo a la tenencia formal de los bienes fideicomitidos para que, ante la eventualidad de incumplimiento del fiduciante de la obligación avalada, liquide los bienes y salde la misma.
3- Fideicomiso de administración o de inversión: Son aquellos contratos, en los que el fiduciante transfiere la propiedad de bienes al fiduciario, para que este los administre profesionalmente y, conforme a lo establecido, reciba los frutos de dicha gestión en carácter de beneficiario.
4- Fideicomiso testamentario: solo podrá ser hecho sobre bienes determinados.
5- Fideicomiso de seguros: El asegurado realiza un contrato de fideicomiso en donde el fiduciario, que será un banco u otra entidad financiera de su confianza, deberá percibir el monto de la indemnización y administrarlo en favor de los beneficiarios.
6- Fideicomiso inmobiliario: el fiduciario recibe del fiduciante un inmueble con el fin de administrarlo o desarrollar un proyecto de construcción y venta de las unidades construidas.
7- Fideicomiso de administración con control judicial: Se establece para las asociaciones civiles con personería jurídica, como las dedicadas a las actividades deportivas que, en casos de quiebras decretadas o concursos preventivos, se constituya un fideicomiso de administración a cargo de un órgano fiduciario con el fin de administrar dichas entidades.
Ventajas del Fideicomiso
* Elimina el proceso judicial de ejecución y con ello las demoras y los altos costos que lo caracterizan. Garantía autoliquidable por excelencia.
* El fiduciario puede ser limitado en sus atribuciones, debe rendir cuentas y sus actos gozan de tutela especial.
* Permite la realización de la garantía a valores de mercado por medio de un procedimiento ágil, extrajudicial y confiable.
* Minimiza el riesgo de los negocios porque se constituye un patrimonio distinto al del fiduciante, fiduciario y al de los beneficiarios, aislando los activos transferidos fiduciariamente. De esta forma como ya se indicó, la quiebra del fiduciante o del fiduciario o de los beneficiarios, no significa la quiebra del fideicomiso, y los acreedores de cada uno de estos no tienen acción contra el fideicomiso.
* Posibilita el desarrollo de emprendimientos más allá de sus participantes. Al disminuir el riesgo, por constituir un patrimonio independiente con los bienes fideicomitidos, mejora la calidad crediticia, posibilitando la baja del costo de endeudamiento.
* Permite una mejor planificación impositiva.
* Brinda transparencia en el manejo de los fondos.
* Brinda una herramienta flexible en economías complejas.
* Evita la creación de una sociedad con un objeto específico.
* Fortalece acuerdos societarios.
B- FIDEICOMISOS FINANCIEROS
“Habrá contrato de fideicomiso financiero cuando una o más personas (fiduciante) transmitan la propiedad fiduciaria de bienes determinados a otra (fiduciario) quien deberá ejercerla en beneficio de titulares de los certificados de participación en la propiedad de los bienes transmitidos o de titulares de títulos representativos de deuda garantizados con los bienes así transmitidos (beneficiarios) y transmitirlo al fiduciante, a los beneficiarios o a terceros (fideicomisarios) al cumplimiento de los plazos o condiciones previstos en el contrato“
Como se observa, en el marco de la ley 24.441 el fideicomiso financiero es tratado como una especie del género fideicomiso, estableciendo que le son de aplicación las reglas generales previstas en la misma ley. El fideicomiso financiero, entonces, se encuentra sujeto a todas las reglas aplicables al fideicomiso general con las modificaciones específicas que se establecen a su respecto.
Operatoria
1) El fiduciante cede los activos al fiduciario por medio de un contrato de fideicomiso financiero.
2) El fiduciario, mediante una securitización, emite certificados de participación o de deuda respaldados por los mismos activos fideicomitidos. Los títulos valores deben ser colocados por el fiduciario a la oferta pública o privada, con los recaudos que la ley establece.
3) Los inversores que adquieran estos títulos valores serán los beneficiarios del fideicomiso.
4) El producto de la colocación vuelve al Fiduciante.
Formas de Emisión
Títulos de Deuda: Tienen por objeto instrumentar la deuda del fideicomiso y motivan el pago de intereses.
Certificados de Participación: Representan, para sus tenedores, el derecho a participación en los resultados, derivados de la operatoria del fideicomiso, asumiendo el riesgo del proyecto, que se financia con los fondos entregados al mismo.
PARA AQUELLOS QUE QUIERAN PROFUNDIZAR MAS, LES DEJO EL SIGUIENTE LINK PARA QUE DESCARGUEN EL SIGUIENTE ARCHIVO EN DONDE ESTE CONCEPTO ES ABORDADO CON MAYOR GRADO DE DETALLE QUE EL PRESENTE ARTÍCULO.
Descargar Archivo "Fideicomisos"
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jueves, 2 de octubre de 2014
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Fideicomiso Financiero y Ordinario: En que consisten |
miércoles, 1 de octubre de 2014
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Camino al éxito |
Estimados lectores, pretendo que este artículo sea otro gran aporte a todos los que necesiten unas palabras de aliento y motivación, o bien, ayude a comprender los secretos ocultos detrás del éxito empresarial. Al igual que la entrada "Sobreviviendo a los Momentos Díficiles" -de hecho, este artículo es una especie de continuación- abordaré el tema desde una perspectiva general. Luego, cada individuo podrá tomar -o dejar- estas palabras y adaptarlas a su situación particular. En muchas ocasiones como esta, tratamos aspectos tan importantes de la vida, que sería un pecado sesgar los mismos y orientarlos únicamente al ámbito de los negocios. Por ello, prefiero escribir y desarrollar este concepto en profundidad y en forma genérica, brindando la posibilidad de que cada uno saque sus propias conclusiones y aplique esta ideología en su vida personal, a fin de mejorar como seres humanos, crecer a nivel espiritual y elevar la calidad de vida.
Ahora si, aboquémonos al tema.
¿Cuál es el objetivo de mi vida? Ésta es una pregunta que todos nos hacemos en algún momento de la vida. De lo contrario, aún no hemos vivido y sería un buen momento para replantearnos muchas cosas. La respuesta más común que reviste este interrogante es: "Alcanzar la felicidad". Y están en lo cierto; toda persona que se encuentre dentro de sus cabales, desea ser feliz.
Pero...¿Qué es la felicidad? ¿Cómo la mido?
La felicidad es un concepto totalmente subjetivo e inconmensurable. Es un estado de ánimo que se percibe a lo largo del tiempo. No es lógico que una persona diga que ayer estaba triste y hoy está feliz, ya que se estaría engañando a sí misma. Tampoco puede manifestar que es feliz porque tiene tanto dinero, fama, poder, atracción y belleza física, entre otras cosas vanas.
La felicidad es una sensación interna, la cual perdura en el tiempo. De manera que, al ser un concepto subjetivo, duradero, inconmensurable y -agreguemos- intangible, debe alcanzarse por medios que tengan tales características. La clave es la subjetividad y el espíritu. Éste último es quien experimenta esa sensación que todos buscamos alcanzar, y no el cuerpo humano.
El dinero se puede medir y tocar, la fama opera claramente fuera del ámbito espiritual, el poder es una conjunción entre dinero, estrato social de pertenencia y belleza externa, y podríamos seguir mencionando muchos conceptos más que entran en esta categoría engañosa que a muchos los termina deprimiendo. Por ello, como ninguno de estos conceptos opera en el ámbito espiritual, por sí solos no pueden ser factores que influyan de manera directa sobre la felicidad de un individuo.
La felicidad de una persona que vive en una casa de dos ambientes con un ingreso de US$ 400 mensuales, puede ser mayor que la de aquél individuo que es presidente de una nación, vuela en jet privados y recorre todo el mundo. Esto ocurre por lo ya enunciado, la felicidad opera en el campo de lo espiritual y es una sensación que no se mide ni por el dinero, fama, belleza, etc.
Muchos filósofos argumentan quela felicidad auténtica es la que experimentas cuando haces lo que debes estar haciendo. Si bien esto es cierto, no es mi intención profundizar mucho más al respecto. Solamente lo menciono como marco de referencia.
Por lo general, la gente piensa que si gana mucho dinero será feliz o si viaja por el mundo alcanzará el éxito, pero, una vez obtenidos estos logros, la sensación sigue siendo la misma o incluso peor, debido a que no se colmaron las expectativas. Un buen ejemplo para ilustrar esta idea es aquella persona que recibe un regalo enorme envuelto en el mejor papel con el aroma más rico del mundo. Seguramente esta persona estará muy contenta y saltando de alegría. Ahora, una vez que abre el paquete, se da cuenta que allí adentro había un trapo...¿Cómo se sentirá ahora esta persona?. De esta misma manera, nos engañamos constantemente pensando que alcanzaremos la felicidad con cosas materiales, pero luego, al obtenerlas nos decepcionamos y acumulamos solo frustraciones.
Muchos estarán sorprendidos al descubrir tal verdad. Me conformo con abrirles un poco la mente e invitarlos a pensar. Pero, seguramente, otros estarán pensando que quien escribe estas humildes palabras no ha descubierto nada nuevo y, un último grupo, se estará preguntando qué tiene que ver todo esto con el título del artículo. Todos tienen razón, pero el que entienda esto, al final de estas líneas sentirá que ha aprovechado el tiempo al tomarse la molestia de leerme.
Profundicemos un poco más...
El término apropiado para definir a la antítesis de la felicidad es "Depresión". Entonces observamos que: una persona puede ser feliz; no serlo, o peor aún, caer en la depresión. Otra sensación, aunque en este caso, sumamente dolorosa que genera un sentimiento de desesperanza y desesperación, el sentimiento de no estar avanzando hacia ningún objetivo, de sentir la imposibilidad de alcanzar cualquier objetivo. Y, la causa de la depresión es justamente eso: la ausencia de un movimiento hacia un objetivo.
En la vida todo puede detenerse salvo una sola cosa: el tiempo. Cuando uno siente que la vida transcurre sin que se esté experimentando algún progreso significativo, sobreviene el sentimiento de estancamiento y de desesperación.
El foco de la cuestión: Los logros
La felicidad es la reacción de nuestro espíritu al desarrollo personal, al crecimiento y logros personales. Y la depresión es la respuesta del espíritu al estancamiento y ausencia de logros. El individuo con depresión quizás no sepa que ésta sea la causa de su problema, pero su espíritu sí.
De modo que estamos en condiciones de afirmar un nuevo concepto: La felicidad auténtica se alcanza durante el proceso en que la persona se plantea objetivos y los va logrando. Esta sensación que se produce cuando uno se propone metas, se esfuerza por conseguirlas y, finalmente, las logra, constituye el paso principal hacia el camino interminable de la felicidad.
La felicidad no es generada por el dinero (cosa material) sino por el proceso que me lleva a obtenerlo o, mejor dicho, por la sensación se estar alcanzando los logros propuestos (cosa espiritual). Es el proceso lo que se disfruta, aunque todos se mareen pensando que lo es solamente el resultado. Por ello, muchos buscan soluciones de corto plazo para ser felices. Hoy en día, las soluciones fáciles son bien vistas por la sociedad. Pero con una mano en el corazón, ¿Se disfruta más US$1.000.000 ganados en una lotería o sorteo, o el mismo monto de dinero obtenido a través del esfuerzo y trabajo? No caben dudas dela respuesta, y ésta refleja claramente que lo que produce satisfacción es el proceso. En ambos casos tengo el mismo dinero, sin embargo, en el segundo de ellos la sensación será mucho más placentera.
Por otro lado, muchas veces puede parecer que una persona está sufriendo para conseguir algo, pero ésta es otra situación engañosa. Remitiendome a los negocios por primera vez en el artículo, hay ocasiones en las que los emprendedores tienen una idea en mente y la quieren llevar a cabo. Deben desarrollar y armar un plan de negocios, el cual lleva mucho tiempo y esfuerzo. En síntesis, demanda mucho trabajo, horas sin dormir, fines de semana ocupados y mucho más. Cualquier persona que vea la cara y gestos de exhaustos de estos emprendedores dirá : "Pobres, no descansan ni un poco, no tienen vacaciones, no duermen, no disfrutan". Pero, es jutamente todo lo contrario! Al margen de esos gestos y la expresión corporal, por dentro hay una sensación común de placer, de sentir que se está avanzando hacia un objetivo. Por ello, es una sensación espiritual y no corporal. Lo mismo sucede cuando un estudiante pasa horas y horas sin dormir estudiando para un exámen o mismo, un hombre en el gimnasio levantando unas mancuernas bien pesadas. Su cara puede reflejar dolor, pero por dentro sabe que ese dolor es parte de algo bueno.
En consecuencia, menciono un nuevo concepto: Las cosas que llegan fácilmente sólo proporcionan una felicidad superficial; a menos que se invierta trabajo en ellas, la satisfacción que proporcionan es mínima.
Claves del éxito
Por último, una vez comprendido que el éxito se genera en el proceso de estar avanzando hacia un logro y que, en el caso contrario se produce depresión, mencionaré ciertas claves que ayudarán a toda persona a reducir las probabilidades de caer en la depresión y por ende, aumentar las de alcanzar la felicidad.
Reitero el circuito virtuoso: cuando se logran objetivos, se alcanza la felicidad; cuando no se logran, se produce la frustración, la cual desemboca inevitablemente en la depresión. El principal problema es que en este estado, la voluntad de la persona es mínima. Por ello, es muy díficil salir de este círculo negativo. Mejor prevenir que curar.
Claramente, hay que buscar formas de reducir la frustración, es decir, el no logro de objetivos y metas. Cada uno tendrá sus maneras y fórmulas propias y yo propongo las siguientes y agrego que, la ausencia de éstas, causa frustración:
1- Planificación: Una vez que definimos metas, necesitamos armar un plan acerca de como conseguirlas. Tenemos que estar preparados, no podemos fijar una meta y avanzar en pos de su consecución sin un plan. Su omisión probablemente dificultará el logro del objetivo y generará frustración. Debemos planificar todo el tiempo: no podemos ir a un colectivo y cuando nos subimos darnos cuenta de que nos tenemos monedas. De la misma manera, al construir una empresa, se debe planificar. No se pueden dejar las cosas libradas al azar.
2- No perfeccionismo: El ser humano, por naturaleza, tiende a ser perfeccionista. Este aspecto, también es causal de frustración ya que nunca se termina de estar conforme con el logro, nunca se alcanza el objetivo. Debemos entender que no somos seres perfectos, por ello, tenemos que ser conscientes de nuestra imperfección y evitar la "depresión sin sentido". Cien veces nos podemos caer y cien veces nos vamos a levantar.
3- Adaptación a los cambios: La flexibilidad es otro aspecto que aumenta las probabilidades de alcanzar el éxito. En todo momento debemos estar abiertos a escuchar y analizar la situación y predispuestos a adaptarnos al cambio si fuese necesario. Muchos individuos se quedan en el clásico "yo soy así, no me digas lo que tengo que hacer". De esta forma uno se estanca en vez de avanzar.
Consideraciones finales
Para concluir, me gustaría que cada uno pueda adaptar estas palabras a su situación personal en la vida en general. Seguramente, si siguieron atentamente la lectura se habrán dado cuenta de que estos consejos se encuentran íntimamente relacionados al mundo de los negocios, pero son de carácter general y no quise centrarme solamente en ello.
Una empresa que quiera ser exitosa deberá saber adaptarse a los cambios, contar con recursos humanos claves que comprendan el concepto del no perfeccionismo y, PRINCIPALMENTE, deberá planificar. Henry Mintzberg decía: "Planificar es prepararse para lo inevitable, anulando lo indeseado y controlando lo controlable".No olviden estos conceptos si quieren alcanzar el éxito. Entiendan que si se estancan corren el riesgo de frustrarse al no perseguir objetivos y ésto constituye una situación de carácter peligroso.
Concluyo con una frase que encaja perfecto en esta parte: "No hay duda alguna de que esa experiencia interna es de felicidad. El hecho de que la expresión externa es una de dolor es irrelevane; al contrario, si el dolor constituye una medida de tu esfuerzo, si sientes dolor porque estás dando todo lo que puedes dar para hacer lo que debes hacer, ese dolor es justamente la causa de la alegría. De hecho, es la alegría misma. Las palabras son inadecuadas para expresar la profundidad de lo que ocurre en el interior, pero si alguna vez has luchado y sufrido realmente para construir algo, sabrás exactamente a lo que se refiere aquí. Y si nunca has luchado y sufrido para construir algo, nunca has vidido entonces".
Agradezco el tiempo que se tomaron para leer el artículo. Espero sus comentarios.
Saludos.